Introducción al calibrado de cámara
Dentro del mundo de la gestión de color existe una bifurcación entre el camino a elegir para la elaboración de Perfiles ICC y el llamado ‘Calibrado de Cámara‘, por el que ha apostado Adobe con la ayuda de las tarjetas Colorchecker de 24 parches y el flujo de calibrado a partir de archivos DNG.
Sin embargo hay que prestar atención que el uso de perfiles de cámara o perfiles DNG no es excluyente de la gestión de color del ICC. Los perfiles de cámara surgen de la necesidad por parte de Adobe de profundizar en las especificaciones de color durante los procesos de revelado. Los perfiles de cámara trabajan durante el revelado Raw, o más propiamiente dicho, sobre imágenes referidas a escenas reales (input-referred) y los perfiles de color del ICC trabajan sobre imágenes procesadas (output-referred).
El flujo de trabajo para obtener perfiles ICC ya lo vimos en otro apartado, por lo que introduciremos el flujo a partir de un DNG. Cabe citar, que el conocido revelador Capture One todavía no ha optado por este procedimiento y ha continuado en la línea del uso exclusivo de perfiles ICC para la gestión de color y asignación de Looks a las imágenes resultantes.
Un archivo DNG no es más que un archivo RAW pero ajustado a una especificación y norma que, actualmente, los RAW no cumplen. Hay algunos fabricantes (Leica, Samsumg, Hasselblad, etc.) que ya empiezan a incluir esta especificación en sus equipos con el fin de generar un RAW universal. De las aspiraciones de Adobe por popularizar el DNG surge un flujo de trabajo basado precisamente en este formato de archivo.
Definición del proceso de calibrado
Como cualquier proceso de perfilado procedemos a fotografiar nuestra carta de color. Aquí usaré una Colorchecker Passport, que es una versión de bolsillo de la Colorchecker Classic de 24 parches. Como ya hemos citado en otros artículos, en este punto la exposición y el balance de blancos son fundamentales. La Colorchecker Passport trae una pequeña carta de blancos bastante práctica, ya que es interesante hacer el balance ya en cámara, para evitar tener que hacer posteriores ajustes en el revelador.
Primero necesitamos un DNG. Lo más probable es que nuestra cámara no los genere aún, por lo que deberá surgir de la conversión de un RAW a DNG. Este proceso lo podemos hacer por dos vías: con DNG Converter una herramienta gratuita de Adobe diseñada exclusivamente para estos procesos; o a través del propio ACR desde el menú Guardar Imagen y eligiendo el tipo de imagen como DNG.
El segundo paso es recurrir a una aplicación para generar la ‘Calibración de cámara’ o pseudo peil. De nuevo se nos presentan dos posibilidades: hacerlo desde el editor DNG Profiler de X-Rite que acompaña a nuestras tarjetas Colorchecker Passport, y que lo de hace de forma bastante automatizada, ya que nada más abrir la imagen la propia aplicación detectará los parches; o recurriendo a DNG Profiler Editor una pequeña utilidad gratuita lanzada, ya en 2008, por Adobe para este fin.
DNG Profiler Editor quizás sea un poco más confuso que el de X-Rite, aunque basta con abrir una imagen en la aplicación, recurrir a la pestaña Chart y colocar unos pequeños discos sobre el parche de color correspondiente, de forma que ubique la posición de las cuatro esquinas. Posteriormente activamos Create Color Table y sin ningún ajuste más, desde el menú File se elige la opción Export Profile.
Tanto en una como en otra aplicación el resultado de la creación del ajuste o perfil es un archivo que se ubica en un determinado directorio (por defecto), a donde, tanto LR como ACR, acudirán para cargar esos ajustes.
Otra opción a estos dos pasos, es hacerlo desde LR con el plugin que facilita X-Rite con su tarjeta Colorchecker Passport. Una vez instalado este plugin debemos cargar el RAW que contiene la captura de nuestra carta Colorchecker. A continuación en la opción Exportar, elegiremos como salida el plugin X-Rite Presets. Sin más, y tras un pequeño intervalo de tiempo, se creará nuestro ajuste de cámara.
Tras estos pasos, ya sea por una u otra vía, en el menú de Calibración de Cámara o Camera Calibration de ACR o LR, ya podemos elegir la calibración que más nos interese para cada revelado, en función de la luz, equipo, etc.
Hasta aquí es donde llegan la mayoría de tutoriales y publicidad generada entorno al workflow de calibración con DNG.
Si quieres saber más sobre la creación de perfiles de cámara puedes consultar el artículo posterior: «Calibrado de cámara DNG para ACR y Lightroom«, donde se detallan a fondo los procesos de calibrado de cámara.
Sin embargo, a poco que observemos podemos apreciar la necesidad de seleccionar un perfil antes de darle la salida final a nuestra imagen. La gente de Adobe parece tener su propia estrategia entorno a la gestión de color y han decidido, no sólo esconder, sino limitar el uso de perfiles ICC a tres posibles: Adobe RGB, sRGB y ProPhoto en LR y añadiendo el ColorMatch RGB en ACR.
En este paso ACR hará una conversión de nuestra imagen hacia el perfil elegido, por lo que la opción más sensata es el uso del perfil Prophoto, ya que este, es el que posee el gamut más amplio, con lo que nos aseguraremos, que todos los matices de color de nuestra imagen entrarán dentro de este espacio de color. Si elegimos un perfil mas pequeño, como el sRGB, cabe la posibilidad, en particular si trabajamos con colores muy saturados, se pierdan durante la conversión.
Quizás la idea de que Adobe nos ofrezca esta paleta tan reducida de perfiles está motivada por la intención de que, inevitablemente, vamos a recurrir al PS para finalizar nuestro trabajo y no tiene especial relevancia la asignación de perfiles durante el revelado.
Flujo de Trabajo: calibrado Vs creación de perfiles:
Los siguientes ensayos surgen de la idea de comparar la gestión de color con perfiles ICC con la gestión propuesta con el perfilado con DNGs. Las pruebas objetivas de fiabilidad las realizo cogiendo los valores LAB medidos con muestras de color de PS sobre la misma fotografía de mi carta usada para la generación del perfil que estoy asignando y comparándolos con los valores de su archivo de referencia, que contiene los valores LAB ‘de fábrica’ de la carta.
La metodología para este proceso se detalla aquí.
Por tanto, el esquema de mi flujo de pruebas es:
- Hacer un balance de blancos en cámara sobre la escena que contiene mi carta de color.
- Fotografiar mi carta de color.
- Revelar mi carta de color, por ejemplo con ACR, sin ningún preset y prestando atención a que el balance de blancos sea el correcto.
- Generar el perfil ICC con la ayuda de su correspondiente archivo de referencia y Rough Profiler.
- Asignar el pefil ICC resultante a la imagen creada en el punto tres.
- Muestrear la imagen con el Medidor de Color Digital
- Comparar con el archivo de referencia la diferencia entre valores y el promedio de estas diferencias.
El flujo con el perfilado DNG es similar:
- Balance de blancos.
- Realizar una toma, o varias a distintas exposiciones de la carta.
- Abrirla en uno de los perfiladores de DNGs citados anteriormente y generar la calibración de cámara.
- Revelar mi carta en ACR con esa calibración.
- Asignar Prophoto RGB como perfil ICC.
- Muestrear la imagen con el Medidor de Color Digital.
- Comparar con el archivo de referencia la diferencia entre valores y el promedio de estas diferencias
Partiendo de los dos flujos descrito anteriormente he realizado una evaluación de las siguientes combinaciones:
- CCP He revelado neutralmente mi RAW y posteriormente creado el perfil ICC con el TIFF resultante.
- ADOBE He usado el DNG Profile Editor de Adobe, para crear un calibrado de cámara que he usado para revelar un RAW y con salida a TIFF con perfil Prophoto RGB.
- XRITE Igual al punto anterior pero usando el DNG Profiler desarrollado por X-RITE.
- ADOBE+CCP He revelado bajo las condiciones del punto 2, pero creando un perfil ICC con el TIFF creado igual que el punto 1
- XRITE+CCP Igual que el punto anterior pero usando el TIFF generado en el punto número tres.
El resultado de este proceso se resume en la siguiente tabla:
Parches | ΔE* CCP | ΔE* ADOBE | ΔE* XRITE | ΔE* XRITE+CCP | ΔE* ADOBE+CCP |
---|---|---|---|---|---|
A01 | 1,2 | 10,4 | 9,6 | 0,6 | 1,3 |
A02 | 1,8 | 7,8 | 7,5 | 1,6 | 1,9 |
A03 | 2,4 | 7,4 | 9,5 | 2,0 | 2,6 |
A04 | 2,7 | 9,8 | 10,8 | 1,9 | 2,0 |
A05 | 1,5 | 7,3 | 8,6 | 2,4 | 1,7 |
A06 | 2,4 | 10,0 | 7,3 | 1,3 | 2,0 |
B01 | 3,4 | 9,6 | 13,4 | 2,9 | 3,3 |
B02 | 4,3 | 5,3 | 14,5 | 3,9 | 4,4 |
B03 | 2,6 | 4,6 | 10,5 | 2,1 | 2,6 |
B04 | 3,2 | 7,1 | 9,2 | 2,1 | 3,5 |
B05 | 2,0 | 7,4 | 9,3 | 2,4 | 2,3 |
B06 | 3,5 | 7,9 | 12,3 | 3,1 | 3,5 |
C01 | 6,0 | 7,5 | 16,3 | 5,3 | 5,5 |
C02 | 2,2 | 6,7 | 7,6 | 1,6 | 1,8 |
C03 | 3,8 | 7,6 | 11,8 | 2,6 | 3,5 |
C04 | 3,2 | 9,2 | 9,3 | 2,3 | 3,3 |
C05 | 3,4 | 7,2 | 11,2 | 3,1 | 3,9 |
C06 | 12,3 | 13,4 | 14,8 | 12,2 | 12,3 |
D01 | 2,1 | 13,5 | 13,0 | 2,6 | 2,4 |
D02 | 2,1 | 8,3 | 7,9 | 2,3 | 2,3 |
D03 | 2,0 | 6,4 | 5,8 | 2,3 | 2,2 |
D04 | 1,0 | 7,0 | 7,5 | 1,5 | 1,2 |
D05 | 1,9 | 11,0 | 10,4 | 1,8 | 1,8 |
D06 | 3,2 | 10,3 | 10,5 | 2,3 | 2,8 |
ΔE* Promedio | 3,1 | 8,4 | 10,4 | 2,8 | 3,1 |
Cálculos de ΔE* (CIE76) por cada parche de la Colorchecker. La última fila, se corresponde con el promedio.
Conclusiones
Observando los valores globales expresados en la tabla superior, se puede apreciar fácilmente que en los procesos donde usamos exclusivamente el perfilado a partir de un DNG, junto con el uso de Prophoto RGB como perfil de salida para nuestra imagen, experimentamos un mayor índice de error que en las imágenes donde se ha asignado, indistintamente del revelado, un perfil ICC de salida correcto para nuestra imagen.
Recomendaciones sobre el calibrado de cámara
Según lo visto el perfilado, o más bien pseudoperfilado con el flujo DNG, no es exclusivo de la asignación del perfil ICC adecuado para cada escena, luz o dispositivo.
Con la ‘calibración de cámara’ obtenemos imágenes con un buen Look, pero ligeramente más lejos de la reproducción fiel del color que en el proceso de perfilado ICC tradicional.
El flujo con perfiles ICC es la única metodología que nos permite la constancia del color a lo largo de todo el proceso y, por tanto, es imprescindible aun haciendo calibrado con DNGs
A pesar de ser la Colorchecker una carta no recomendable para la elaboración de perfiles, ya que ofrece gamuts ligeramente más pobres que la IT8, es sin embargo, la única que nos permite iniciar una buena gestión de color cuando realizamos trabajos fuera de un estudio.