El artículo «Photographic Exposure Metering and the Infamous ‘18% Calibration'» de Douglas A. Kerr explora la creencia común en la fotografía de que los medidores de exposición y los sistemas automáticos de exposición están calibrados para una reflectancia del 18%. Esta afirmación, ampliamente difundida tanto en la fotografía analógica como digital, se desmenuza para entender su verdadero significado y origen.
Kerr comienza diferenciando entre dos tipos de «exposición» en fotografía, denominando «exposure1» a la combinación del tiempo de exposición y la apertura del diafragma, y «exposure2» a la integral temporal de la iluminancia sobre el sensor o película fotografías. Este último concepto es particularmente crucial para comprender cómo los distintos valores luminicos se registran en el sensor en función de la calibración del sistema de exposición.
El artículo describe cómo los medidores de luz utilizan una técnica llamada medición promedio de luz reflejada, que mide la luminancia promedio de la escena y, junto con la sensibilidad ISO del sistema de película o sensor digital, recomienda un valor adecuado de exposición. Sin embargo, este método presenta desafíos ya que no todos los escenarios tienen una distribución de luminancia coherente que corresponda con la calibración preestablecida.
La calibración comúnmente aceptada en el ámbito de las cámaras digitales se basa en suposiciones sobre la reflectancia promedio de las escenas. Kerr destaca que el valor del 18% surge del supuesto de que en una escena bien iluminada y de reflectancia uniforme, un área con una reflectancia del 18% recibiría una exposición «media» adecuada para la mayoría de las aplicaciones fotográficas. Sin embargo, el valor exacto de la reflectancia puede variar; algunas interpretaciones sugieren un promedio del 12.8%, dado que maximiza la utilidad dinámica del sensor al evitar tanto la sobreexposición como la subexposición de los elementos de la escena.
La discusión se extiende al uso de tarjetas grises en el proceso de metering. Kerr explica que mientras es difícil encontrar tarjetas grises con el valor de reflectancia exacto del 12.8%, las tarjetas grises del 18% son fácilmente accesibles y han ganado popularidad por razones históricas relacionadas con la fotografía en película. Sin embargo, en la fotografía digital, una tarjeta gris del 18% puede llevar a una subexposición de media parada, lo cual debe ser compensado manualmente aumentando la exposición leída por el medidor.
Kerr concluye que la razón detrás de la prevalencia del 18% se encuentra en una combinación de evolución técnica y folclore fotográfico. La calibración de los sistemas de exposición es una convención que permite obtener resultados consistentes en una media amplia de situaciones, pero no es un valor absoluto y puede ser ajustada según las necesidades específicas del fotógrafo y las características del equipo utilizado.
Este análisis no solo desentraña la famosa calibración del 18%, sino que también proporciona una comprensión más profunda de los principios fundamentales detrás de los sistemas de exposición fotográfica y sus aplicaciones prácticas, tanto en fotografía analógica como digital.