El artículo «New high-resolution IR-color reflectography scanner for painting diagnosis» escrito por Fontana, Raffaella; Gambino, Maria Chiara; Greco, Marinella; Marras, Luciano; Materazzi, Marzia; Pampaloni, Enrico; Pezzati, Luca; y Poggi, Pasquale en 2003, describe un innovador sistema de escaneo para reflectografía infrarroja de alta resolución diseñado para el diagnóstico de pinturas. Publicado bajo los auspicios del Istituto Nazionale di Ottica Applicata en Florencia, este trabajo presenta un avance significativo en las técnicas de reflectografía existentes, permitiendo la adquisición simultánea de una imagen reflectográfica en infrarrojo y una imagen a color, las cuales pueden superponerse con precisión.
Tradicionalmente, la reflectografía infrarroja se emplea en el diagnóstico no destructivo de pinturas antiguas, permitiendo visualizar detalles escondidos bajo las capas de pintura gracias a las características de transparencia a la radiación infrarroja de los materiales que las componen. Originalmente desarrollada alrededor de 1990, la técnica de reflectografía de alta resolución enfrentó limitaciones significativas con los detectores de PbS Vidicon y cámaras CCD, incluyendo baja sensibilidad a la luz, distorsión geométrica de las imágenes y un contraste limitado debido al escaso rango tonal.
El nuevo escáner, descrito en el artículo, supera estas limitaciones al incorporar un sistema de detección basado en una fotodiodo InGaAs que cubre un amplio rango espectral (0.9-1.7 µm). Este sistema garantiza una alta resolución espacial (16 puntos/mm²) y alta dinámica tonal (miles de niveles de gris). La cabeza óptica del escáner incluye un doblete acromático con una longitud focal de 73,5 cm, permitiendo una magnificación unitaria y una adquisición libre de aberraciones geométricas. Además, el sistema de iluminación utiliza lámparas halógenas de baja tensión estabilizadas en corriente para asegurar una iluminación uniforme y estable durante el escaneo.
Una característica clave del nuevo dispositivo es su habilidad para adquirir imágenes de reflectogramas y a color que pueden ser superpuestas con una simple traducción de 250 micrómetros, permitiendo comparaciones punto por punto entre las imágenes infrarrojas y en color y facilitando el análisis digital. Esta superposición perfecta mejora considerablemente la interpretación de los reflectogramas, ayudando a identificar detalles ocultos y fases de realización de la obra. Una notable aplicación descrita incluye el estudio de «Madonna del Cardellino» de Raffaello, donde se pudieron analizar técnicas de dibujo subyacentes y distinguir pigmentos que a simple vista son indiscernibles utilizando técnicas de falso color.
El artículo también resalta ejemplos de aplicaciones exitosas de este dispositivo en diagnósticos de pinturas antiguas, como en el análisis del «S. Giovanni Battista» de Bronzino, donde el reflectograma reveló una figura subyacente oculta de un caballero Mediceo, demostrando la capacidad del dispositivo para descubrir cambios en la intención del artista y modificaciones subsecuentes realizadas por otros pintores o durante restauraciones.
En conclusión, el artículo presenta un avance significativo en la tecnología de reflectografía infrarroja con la introducción de un escáner de alta resolución que permite no solo adquirir imágenes infrarrojas y a color de alta calidad y resolución, sino también superponerlas con gran precisión. Esto constituye una herramienta valiosa para conservadores y expertos en arte en la interpretación y conservación de pinturas antiguas, además de abrir nuevas posibilidades para el análisis detallado de las técnicas subyacentes utilizadas por los artistas.