El artículo «Banding characterization for inkjet printing» escrito por John C. Briggs, Mike Murphy y Yichuan Pan en 2000 aborda la problemática del «banding» en las impresoras de inyección de tinta y propone un método para cuantificar y mitigar su impacto visual mediante técnicas de análisis de imagen automatizadas. El término «banding» se refiere a la aparición de bandas no deseadas y visibles en áreas de color sólido, un defecto particularmente notorio y objetable en las impresiones digitales. El estudio se centra en cómo los modos de impresión multipaso pueden disminuir la severidad de estas bandas, y se sirve de sistemas automatizados para evaluar la calidad de la impresión en términos objetivos y reproducibles.
Los autores explican que en los modos de impresión multipaso, múltiples boquillas se utilizan en varios pasajes para imprimir cada fila de puntos completa. Por ejemplo, en un modo de 2 pasadas, el primer pasaje de la impresora coloca la mitad de los puntos necesarios para completar la fila. Luego, el papel se avanza la mitad de la altura de la fila, y los puntos faltantes se rellenan en el segundo pasaje. Este método ayuda a esconder posibles defectos causados por boquillas mal direccionadas o atascadas, ya que los puntos se distribuyen a través de diferentes boquillas en cada pasada. Los modos de 3, 4 o más pasadas se implementan de manera similar, dividiendo la tarea de impresión entre más pasajes y reduciendo así la visibilidad de las imperfecciones.
Para evaluar la eficacia de los modos multipaso, se utilizaron muestras impresas en una impresora Encad NovaJet 700, las cuales fueron analizadas con un Sistema de Análisis de Imagen Automatizado IAS-1000. Este equipo permite escanear las muestras a alta magnificación y obtener datos de reflectancia que pueden visualizarse tanto en el dominio espacial como en el de frecuencia. Utilizando la Transformada Rápida de Fourier (FFT), se pueden identificar las frecuencias componentes de las bandas presentes, lo cual proporciona información valiosa para diagnosticar las causas mecánicas, eléctricas u otras que generan el problema.
El diseño de las pruebas consistió en patrones específicos impresos en hojas estándar, con bloques de colores (cian, magenta, amarillo y negro) en diferentes tonos. Las muestras se imprimieron en modos de 1, 3, 4, 6, 8 y 10 pasajes para comparar la reducción de banding en función del número de pasajes. El análisis de los datos mostró que la severidad del banding disminuye notablemente entre el modo de 1 pasada y el de 3 pasadas, con reducciones adicionales aunque menos significativas en modos de más pasadas. Los gráficos de reflectancia y los perfiles de frecuencia ayudaron a visualizar cómo los modos de impresión multipaso reducen tanto la amplitud como la frecuencia de las bandas, haciendo menos perceptible el defecto.
El artículo destaca la importancia de desarrollar métricas cuantitativas para la evaluación del banding, mencionando que tanto el rango de reflectancia (diferencia entre máximos y mínimos) como la desviación estándar de los perfiles de reflectancia son útiles para caracterizar la severidad del banding. Estas métricas podrían integrarse en un estándar internacional para la calidad de impresión, facilitando así la comparación y mejora de diferentes tecnologías de impresión.
La conclusión es que es posible cuantificar objetivamente la severidad del banding utilizando instrumentos de medición automatizados, y que este análisis puede guiar a los desarrolladores de impresoras hacia una mejor comprensión y mitigación del problema, optimizando el equilibrio entre velocidad de impresión y calidad de imagen.
